Qué es el «amaeru» en el género idol?
En el mundo idol, una «idol» establece un vínculo de «necesitar ser protegida cuidadosamente», y por su personalidad establece en los fans esa misma necesidad de «dependencia», un sentimiento que es la base en la cual los japoneses establecen todas sus relaciones afectivas y por ello son completamente diferentes al resto del mundo.
El papel de una «idol» no es ser una perfecta bailarina o cantante, sino que debe mostrar al público el esfuerzo que hace por mejorar, debe de observarse su desarrollo con cada presentación, su mejoría en imágen y sobre todo en aumentar su sensibilidad ante su entorno, sus fans y sus interpretaciones. Por ello una idol no debe mostrar malicia o violencia, sino por el contrario, sensibilidad pero con naturalidad, no forzada, siempre de acuerdo con el carácter natural de cada idol.
Una «idol» debe ser convertirse en «modelo» a seguir, una persona que busca siempre «mover corazones» con cada uno de sus actos. Cuando una «idol» es capaz de crear esa «magia» de hacer llorar a alguien, hacer «gritar» a un fan de manera espontánea (no por obligación, por eso no cohersionan con clubes de fans) y crear ese vínculo de sensibilidad, entonces decimos que una idol está creando el «amaeru».
Por eso, el término «idol» se fundamenta sobre las bases de «kiyoku, tadashiku, utsukushiku» (pureza, honestidad, belleza), pues es la base sobre la cual todo se construye y lo que hace a las idols tan especiales y diferentes, aún con respecto a quienes simplemente realizan cosplay.
Yumeki Angels entregan obsequios a Yoko Ishida, quien llora de la emoción.
Yumeki Angels -Tenshi no bodyguard, original de Yukiko Iwai, Onyanko Club 1986